Alejandro Ramón, concejal delegado de Cementerios del Ayuntamiento de València, habla del sector con Funermostra, la feria internacional de serivios y productos funerarios, que se celebra en Feria Valencia del 18 al 20 de octubre de 2023.
- Recientemente la revista Adiós Cultural ha concedido al Cementerio General de València el premio a mejor cementerio de España. ¿Cómo valora este galardón?
Es de agradecer, porque muchas veces no se valora el trabajo de la administración local en los cementerios, y es un orgullo que el jurado de la revista Adiós se haya fijado en València. Además, es un aliciente y un impulso para mejorar los camposantos municipales.
- Uno de los méritos que ha influido en la decisión del jurado profesional de la revista ha sido el proyecto Requiem in Power de instalación de placas solares en los recintos funerarios de la ciudad para generar energía eléctrica. ¿En qué punto se encuentra este plan?
Estamos en la última fase de la tramitación de la documentación para empezar a instalar las placas en los cementerios. Si no pasa nada, durante el mes de marzo empezaremos a instalar las primeras placas en el Cementerio General, el de Campanar, el de Benimàmet, el del Cabanyal y el del Grau. Entre los cinco recintos hemos estimado una generación de aproximadamente 2,8 MW.
- ¿Iniciativas como Requiem in Power contribuyen al cambio de paradigma en cuanto a los usos y finalidades de los recintos funerarios?
Totalmente. Creo y espero que este proyecto inspirará a otros muchos cementerios de España y de otros países para darse cuenta de que hay mucha superficie aprovechable en los cementerios para generar energía limpia, renovable y de proximidad sin perjuicio de la actividad funeraria.
Y esto es muy importante por dos razones: la energía se produce cerca de donde se va a consumir, y por tanto, hay muchas menos pérdidas. Pero sobre todo si empleamos estas superficies que no tienen uso dejamos de usar superficie agrícola fértil y otros parajes en los que la instalación de macroplantas tiene un impacto muy negativo en el paisaje y en el entorno rural.
- Los cementerios de València también cuentan con rutas culturales guiadas en las que se explica la historia y arquitectura de los recintos. ¿Estas rutas contribuyen también al referido cambio de paradigma?
Sí, Creo que iniciativas como estas rutas son esenciales para que la ciudadanía tome conciencia de lo que es un cementerio, que no solo es un espacio para rendir homenaje a las personas fallecidas, sino también son espacios llenos de arquitectura, especies vegetales de interés y de personajes ilustres. Son, en definitiva, lugares llenos de historia y de atractivos.
- En 2024 València será Capital Verde Europea. ¿Qué papel juegan los recintos funerarios de la ciudad en este proyecto en cuanto a sostenibilidad urbana e impulso de la transición ecológica?
Además de generar una gran cantidad de energía fotovoltaica tienen una gran concentración de masas de material vegetal. En este sentido quiero destacar una de las iniciativas que hemos puesto en marcha esta legislatura, la urna árbol, que se entrega con las cenizas resultantes de las incineraciones que se realizan en el crematorio municipal, con el fin de que las familias las plantes en sus propiedades. Aunque en menor medida, también contribuye a reverdecer la ciudad.
- ¿Qué papel puede jugar un certamen profesional como FUNERMOSTRA en la consecución de un modelo funerario más sostenible y más cercano a la sociedad?
Yo creo que es una suerte que FUNERMOSTRA se celebre en València, ya que sirve para acercar a la sociedad el sector funerario y darle la importancia que se merece. No en vano, el País Valenciano es una potencia en la construcción de ataúdes y otros artículos funerarios, y es algo a lo que no se le da la importancia que realmente tiene en nuestra economía. Además, FUNERMOSTRA contribuye a visibilizar otros modelos de gestión funeraria, basados en la innovación y la sostenibilidad